Si le preguntamos a los niños qué es lo que más les gusta de la Navidad, tendríamos una respuesta casi al unísono: los regalos. Melchor, Gaspar y Baltasar cargan sus camellos de buenos deseos, pero también de muchos juguetes. Qué regalar y cuánto puede convertirse en un quebradero de cabeza y de bolsillo para los padres.
¿Con qué tipo de juguetes y cuántos es adecuado que se despierten la mañana del 6 de enero? Las películas americanas navideñas dibujan la ilusión de los niños a través innumerables regalos bajo un perfecto abeto iluminado. Pero, ¿es realmente esta ilusión la que queremos que se despierte en nuestros hijos? Esa que parece dependiente de la cantidad de paquetes a desenvolver. ¿Cuáles son las consecuencias de darles todo lo que piden y más?
A continuación te dejamos una guía para elaborar tus propias instrucciones para la mejor carta a los Reyes Magos de Oriente que puedan escribir tus hijos.
- Investiga qué es lo que realmente les haría ilusión. Algo que realmente vayan a usar. De esta manera, evitarás ver juguetes que acaben guardados en un cajón y sabrás que realmente van a disfrutar y valorar lo que les hayan traído de Oriente.
- Limita el número de regalos. Calidad antes que cantidad. Si ya has identificado qué les haría ilusión, no regales mucho más. Si obtienen todo lo que piden y más, no valorarán realmente todos sus juguetes. Además, cuantos más tengan menos podrán centrarse en cada uno de ellos, ya que al estar sobre-estimulados les costará más focalizarse y aprovecharlos al máximo.
- Regala creatividad y tiempo en familia. Los mejores son los juguetes que puedan aprovecharse para potenciar su creatividad y para divertirse todos juntos. Con ellos estarás regalando el doble. Si se puede disfrutar en compañía es aún mejor: pasarán tiempo juntos y potenciarán vínculos.
- Vigila la tecnología. Es la compra estrella y tiene muchos beneficios, pero recuerda: ¡limita su uso! Pon normas claras de cuándo, cómo y cuánto tiempo deben usarse.
- No les digas que si se portan mal no habrá regalos ya que es muy improbable que ocurra. Siempre habrá alguien que regale o te asaltará la pena en el último minuto. Puedes aplicar consecuencias en otro momento en el que se vayan a cumplir.
Recuerda que lo más importante para tus hijos no son los juguetes, sino el tiempo y la atención que les das. Fíjate en este fantástico video de IKEA, en lo que eligen estos niños cuando ponen en una balanza juguetes frente a tiempo con sus padres. ¡Te sorprenderá!
https://www.youtube.com/watch?v=5egLxg_7mg0