Desmontando Mitos

¿Qué es la diversidad funcional? 

La Diversidad Funcional es un nuevo término que tiene como objetivo superar la definición en negativo que tiene actualmente términos como discapacidad o minusvalía. Pero ¿por qué un nuevo término?

Hasta la actualidad, hemos ido creando nuevos términos y creando un lenguaje políticamente correcto para designar el hecho de la discapacidad. Pero el problema, no está en la diversidad. Las personas con discapacidad existen, al igual que existen mujeres y hombres, personas blancas y negras, altas, bajas, adultas, ancianas, etc. El problema está en la valoración desigual que se hace de la diferencia; y convierte esta diferencia en desigualdad (FUNDABEM).

Por lo tanto, este nuevo término propone una visión positiva de la discapacidad, ya que tiene en cuenta diferentes capacidades que tiene cada persona, evitando sesgarnos en las limitaciones y restricciones que pueda tener. Es una forma de ajustarnos a la realidad en la que cada persona funciona de manera diferente. Pongamos algunos ejemplos:

1. Una persona sorda, se comunica a través del lenguaje de signos y una persona oyente, se comunica a través del lenguaje oral. Por lo tanto, ambos realizan la misma función, pero de manera distinta.
2. Una persona con lesión medular utiliza su silla de ruedas para desplazarse, mientras que una persona sin lesión medular utiliza sus piernas. Al igual que en el ejemplo anterior, ambas personas se desplazan, pero de manera diferente.

Las personas con diversidad funcional, no sólo se tienen que enfrentar al estigma que condicionan ciertos términos, sino, además, también viven con mitos muy generalizados en la población sobre la discapacidad.

A continuación, te explicamos los 5 mitos más frecuentes:

1. Se encuentran enfermas. Ser una persona con diversidad funcional, no implica tener una enfermedad. Puede que la discapacidad sea consecuencia de alguna enfermedad, pero no siempre es así.
2. Desean que desaparezca la discapacidad. Probablemente, el mayor deseo de estas personas es la inclusión total en la sociedad, sin discriminación alguna.
3. Son personas asexuadas. Son seres humanos y por lo tanto tienen sexualidad como cualquiera.
4. No pueden ser independientes. Dependerá de la preparación que tenga la persona para gestionar su independencia. Es decir, deberá adaptarse a su condición y utilizar las estrategias necesarias para ello.
5. Son como niños. Es un mito muy común que hace que en muchas ocasiones se les trate como niños, sin tener en cuenta que viven un proceso de desarrollo físico al igual que cualquier otra persona.

Si tienes alguna pregunta sobre este tema o quieres hacer alguna aclaración, no dudes en contactar con nosotras.