El príncipe destronado es el título de una novela de Miguel Delibes, y nos viene perfecto para describir a aquel niño que deja de ser el centro de atención, aquel niño que comienza a sentir celos por su hermano. La llegada de un nuevo hermano a casa es estresante para todos los miembros de la familia (nuevas rutinas, menos tiempo, más quehaceres…). Pero sobre todo para el nuevo hermano mayor. Puede llegar a ser el causante de nuevas situaciones de ansiedad, desánimo e incluso sensación de abandono.
Muchas veces escuchamos a las madres afirmar que sus hijos no sienten celos, y por detrás oímos a las abuelas decir “deja que empiece a hacer carantoñas el pequeñín para que veas” y es el mejor ejemplo para describirlo. Los celos aparecen cuando los nuevos hermanos mayores empiezan a sentir que no son únicos para sus padres, que cuando llora no siempre es atendido al instante (o al menos no como antes). En definitiva, que ya no está solo con sus personas favoritas del mundo.
Además, a esto sumamos que cuando llega el nuevo hermano a la familia, todo necesita tener una estructura más firme, comienzan las normas y las reglas, que hasta ahora, no habían… o al menos, no tan estrictas.
Y claro, ante semejante situación, el niño siente que el nuevo es un intruso que intenta arrebatarle el amor y afecto de sus padres, entonces ¿cómo no odiarle? ¿cómo no verlo como un competidor?
Es importante saber cómo se manifiestan los celos en niños, ya que si sabemos qué les ocurre, podremos ponerle remedio:
- Desobediencia
- Retraimiento o indiferencia
- Búsqueda de atención
- Llanto
- Rabietas
- Alteración del sueño y hábitos alimenticios
- Agresividad
- Volver a hacer cosas de “niño pequeño” que ya había superado
- Somatizaciones
Hay varias maneras de tratar estos celos, pudiendo comenzar la prevención desde que la mamá está embarazada, justo después del parto y en la convivencia diaria. Lo que está claro es que en esos tres momentos hay un factor común, y es que la calidad es más importante que la cantidad de tiempo que empleas con tu hijo.
En el centro somos especialistas en psicología infantil, por lo que si estás en esta situación o conoces a alguien que esté sufriéndola, no dudes en contactar con nosotros.